Este sábado 23 de febrero desde las 14 hasta las 20 horas se realizó, en CTA Capital, el taller de actualización y debate organizado por el Comité Argentino de Solidaridad con Haití por el retiro de las tropas de la MINUSTAH. El propósito del Taller fue contribuir al afianzamiento de un equipo de personas y organizaciones dispuestas a asumir una responsabilidad de seguimiento del tema, en sus respectivas organizaciones y hacia la sociedad argentina en su conjunto.
Durante el taller se repasaron varios ejes, el primero sobre la situación histórica y actual de Haití. Comenzó Eduardo Grüner, sociólogo, resaltó algunas particularidades de la Revolución Haitiana, a saber, “en 1804 se produce la primera revolución independentista de América Latina; no solo es la primera en términos cronológicos sino que también lo es ideológicamente porque es la clase obrera haitiana la que toma el poder y funda una nación”.
“La revolución costó 200.000 muertos (el 50% de los esclavos). El sistema de plantaciones haitianas concentraba dos lógicas: la de la fábrica capitalista y la del campo de concentración. Algunos aspectos históricos han sido especialmente silenciados: en 1802 Napoleón envía tropas. Es derrotado pero logran secuestrar a Toussaint Louverture. En 1804 se logra la independencia y en 1805 se redacta la primer Constitución”, agregó Grüner
Henry Boirsolin, integrante del Comité Democrático Haitiano, continuó preguntándose “¿por qué vencieron los esclavos haitianos? El año 1791 representa un corte en la historia, se construye una vanguardia. En los términos de Lenin, Haití reunía las condiciones objetivas y subjetivas para que ocurra una revolución. El sistema esclavista había madurado sus contradicciones al máximo en comparación con otras colonias. Además existía un capital político particular: Mackandal, el vodú (como facilitador de la unidad popular); el creol (más desarrollado en Haití), el desarrollo de la táctica de guerrillas (que tiene sus raíces en las experiencias del cimarronaje)”.
Luego, Boirsolin explicó los límites de la revolución haitiana “el momento histórico (en términos teóricos no existía el marxismo cuando Dessalines plantea la reforma agraria) y el contexto mundial hostil. Se trata de una revolución interrumpida y esta es la clave para la alternativa política en Haití”. “Haití va a seguir necesitando la solidaridad “técnica” de otros países hasta tanto no tenga la “solidaridad política”, concluyó.
Otro de los ejes que se manejaron fue la presencia, rol y consecuencias de la MINUSTAH y las políticas de los gobiernos de América Latina y el Caribe donde se habló de la historia reciente de Haití y en qué contexto llega la MINSUTAH.
Se debatió qué intereses hay detrás de la ocupación. En lo económico, Haití es la fuente de mano de obra más barata para Estados Unidos. Además hay yacimientos de oro, y en general es un país virgen en la explotación de la minería. En lo geopolítico, la cercanía con Cuba es clave; también la ocupación garantiza la presencia de EEUU en el conjunto de las Antillas. Además, la clase dominante en Haití es muy débil, y la presencia de la MINUSTAH garantiza mantener ahogadas las luchas populares.
Así como también se deliberó sobre la situación de las organizaciones políticas en Haití: es importantísimo dar voz a las organizaciones haitianas. Toda la solidaridad que venga de afuera debería primero considerar las demandas populares, y reconocer las instituciones de Haití, como por ejemplo hace Cuba. Decidir por los haitianos qué es lo que ellos necesitan más y cómo hacerlo entraña una ideología racista y de subestimación profunda del pueblo haitiano.
El tercer eje fue las propuestas hacia la construcción de una solidaridad permanente con el pueblo haitiano priorizando el retiro inmediato de la MINUSTAH, la renuncia de Martelly, el juicio a Duvalier y la seguridad alimentaria.
« Desde la CTA-Capital venimos participando en el comité por el retiro de tropas de la MINUSTAH en Haití de las cuales participa la Argentina desde hace años por varios motivos. En primer lugar, es inaceptable por ser una brutal violación a los derechos soberanos del pueblo haitiano que dichas tropas intervengan en la vida interna de ese país. La desinformación existente señalando que son tropas de paz y que tiene una misión humanitaria es desmentida diariamente con los atropellos sobre los habitantes de ese pueblo (introducción de enfermedades reconocidas por la misma ONU, violaciones, etc.). Un mínimo porcentaje del dinero supuestamente destinado a la ayuda económica después del terremoto llegó, lo que demuestra el gran negocio que se genera con la participación de la ONU, las grandes potencias y los ejércitos que participan de la “misión” que cobran “extras” por estar en otros países », explicó Fernando Pita, integrante de la mesa de la CTA Capital.
Y agregó, « como Central sindical también somos solidarios con los compañeros trabajadores haitianos que tienen condiciones salariales y laborales precarizadas al extremo, ya que las empresas que están en Haití impiden cualquier organización sindical. La MINUSTAH cumple también la función para nada “humanitaria” de reprimir las protestas sociales. Por estas y otras razones, nos oponemos a la participación de tropas como la argentina en Haití ».
Participaron del taller de actualización y debate: Fernando Cardozo, Relaciones Internacionales de CTA Capital; Jonathan Gueler, secretario de Derechos Humanos de la FUBA; Nora Cortiñas y Mirta Baravalle, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora; Gladys Jarazo, Diálogo 2000; Beverly Keene, Jubileo Sur y Diálogo 2000; Mariana Antonietta, Construcción UNLP; Romina Righetti; Manuel Bertoldi, secretaria operativa de los movimientos sociales hacia ALBA; Fernando Pita, AGD e integrante de la mesa de CTA Capital; Ana Capdevielle; Antoine Simonnet, Comité por el retiro de las tropas de la MINUSTAH en Haití; María Torrellas y Carlos Aznares; Resumen Latinoamericano.
Beverly Keene
Diálogo 2000 – Jubileo Sur Argentina
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JUBILEO SUR/AMÉRICAS