Puerto Príncipe. Es 12 de enero, tres años de aquel horroroso acontecimiento
que segó la vida a más de 250 mil personas. A pesar de no haber sido
declarado por el Gobierno día de duelo, la población lo ha observado como
tal mediante memoriales generalizados. Estos han sido organizados por las
familias reunidas en casas, iglesias y campamentos, que en ocasiones llegan
a reunir centenares y hasta miles de personas.
El Estado se ha limitado a colocar la bandera a media asta en los edificios
públicos y la aparición del Presidente Martelly en un par de eventos sin
poca trascendencia, mientras el canal de televisión oficial mantuvo normal
su programación, pareciendo que quienes ostentan el poder prefieren que la
población se olvide de aquellos acontecimientos, al igual que la comunidad
internacional, a tres años del terremoto, se ha olvidado de Haití y de la
población que sufre las consecuencias del fenómeno.
El día 11, un día antes, organizaciones haitianas nucleadas en el Colectivo
por el Derecho a la Vivienda en Haití acudieron a realizar una ceremonia
alternativa en el lugar conocido como “fosa común” de las víctimas del
terremoto, para dejar iniciada una Jornada de Lucha y Solidaridad con las
familias de los campamentos y de homenaje a todas las víctimas.
Allí dieron a conocer sus puntos de vistas, demandas y acciones. “Es una
vergüenza que el Gobierno deje pasar la fecha y quiera obligar a la
población a considerar este día como otro cualquiera. Es una falta de
respeto al pueblo, a las miles de familias que han perdido sus seres
queridos y a mas de 400 mil personas que están refugiadas en campamentos sin
que vean llegar la solución a su situación”, consideró Colette Lespinasse
coordinadora del GARR, Grupo de Apoyo a Refugiados que junto a PAPDA, POHDH,
FRAKKA, DOP, entre otras organizaciones constituyen el colectivo de
organizaciones.
Grace Village, la violencia en los campamentos
Grace Village International es el nombre de una orden religiosa que en
Puerto Príncipe es representada por el pastor Joel Jurne y el señor Marc
Antoine Meant. Este campamento llegó a concentrar unas 18 mil familias y en
la actualidad a penas 596. El ceremonial del campamento este 12 de octubre
estuvo dirigido en primer lugar a recordar a las personas que perdieron la
vida durante el evento de hace 3 años. También a las victimas pos terremoto
ocurridas en el campamento ocasionadas por agresiones de hombres armados que
aseguran fueron enviados, en ocasiones distintas por el pastor Joel,
representante en Haití de Grace Village Internacional, atribuyéndole también
el apresamiento, golpeadura y haber ocasionado la muerte de dos niños al
ordenar cerrar las puertas de acceso al campamento en medio de un huracán,
dos niños no pudieron ser llevados al hospital y murieron. Las autoridades
inicialmente se confabularon con el pastor y los grupos armados que agredían
a la población, hasta que la opinión pública llevo a la Alcaldía de Puerto
Príncipe quitar los candados que cerraban las puertas.
La situación existente en este campamento es parte de las agresiones que
sufren muchos campamentos, explicó Reynald Sanon, representante de la
Fuerza de Acción y Reflexión sobre el Derecho a la Vivienda, FRAKKA,
coalición que agrupa comités de campamentos y organizaciones solidarias con
ellos, en el momento que se desarrollaba en el lugar un intercambio de
experiencias con una delegación de organizaciones dominicanas parte de la
Campaña Cero Desalojos.
Estrategias para desalojar a las familias de los campamentos
El colectivo por el Derecho a la Vivienda en Haití indica que las
principales estrategias utilizadas para desalojar a las familias de los
campamentos han sido la violencia y el terror mediante grupos armados como
ha pasado en Grace Ville y mayormente en Delmas, y otra ha sido entregar a
las familias 20 mil gourdes logrando que la gente salga de las plazas
públicas y se resitué en otros campamentos o lugares igualmente inhóspitos.
Grace Village es un ejemplo de cómo se producen esta campaña represiva. Las
familias son acosadas, golpeadas, en casos las mujeres son violadas, se dan
casos en que las carpas son quemadas, se amenaza con envenenar el agua…luego
de lo cual algunos se retiran con sus hijos de esos lugares, los cuales una
vez son aislados para evitar nuevas penetraciones…y así van siendo cercadas
y aisladas las familias.
Y las autoridades….
Para la gente refugiada en campamento no hay justicia, hasta hoy no ha
existido justicia. El artículo 22 de la Constitución establece el Derecho a
la Vivienda, nos dice Antonal Mortimé de la Plataforma de los Derechos
Humanos, POHDH, de Haití. Nada se ha hecho para restablecer este derecho
humano fundamental a las familias de los campamentos. Al contrario, ha
existido mucha complicidad de las autoridades con la violencia y en
ocasiones, como ha sido el Alcalde de Delmas, este ha patrocinado los
desalojos y las agresiones a las familias que sobre vive ”bajo las carpas”
lo que ha obligado a las organizaciones del Colectivo a presentar recursos
contra estas autoridades, lo cual es también aseverado por el Grupo de
Abogados Defensores de los Oprimidos, DOP.
Violencia Intrafamiliar
La vida en los campamentos ha resquebrajado las relaciones familiares
grandemente haciendo estragos en la vida familiar. Por ello las mujeres han
comenzado a crear organizaciones de género, haciendo conciencia y
denunciando el maltrato a las mujeres por muchos hombres en los campamentos.
La asociación de mujeres del mega campamento 4 organizó un encuentro taller
de intercambio sobre el tema con la delegación dominicana donde presentó
varias mujeres víctimas de esta violencia, parte de la situación de los
campamentos.
Es urgente la reparación
Para Camille Chalmers, Director Ejecutivo de la Plataforma para el
Desarrollo Alternativo, PAPDA, y miembro de Jubileo Sur, la comunidad
internacional está en gran deuda con Haití, deuda histórica y también nueva,
todas las cuales deben ser reparadas, desde el bloqueo francés tras la
independencia, la traída del cólera y la ocasionada por la pérdida de
soberanía tras la actual ocupación y las anteriores, expreso en el
recibimiento que se hizo a la delegación dominicana representantes de la
campaña Cero Desalojos como parte de la Jornada binacional de solidaridad y
lucha con las familias de los campamentos seguirá desarrollándose hasta el
día 18 de enero en diversos puntos de Haití.
12 de enero, 4h53 PM……es la hora exacta del terremoto…la ceremonia comienza
en el parque ecológico Habitación Leclerc de Puerto Príncipe. La expresión
del sentido acto llega a todos y todas.
….”Por qué este grito de la gente que ha perdido su familia”… (A lo lejos
repican las campanas).
…..”En vez de llorar por qué no caminar hasta encontrar la vida”…. (De nuevo
el repicar de campanas).
…”Por qué ustedes me siguen llamando como si estuviera yo entre ustedes…el
recuerdo es lo único que queda”…. (Expresa quien representa a los millares
de muertos por el terremoto).
…..”Ustedes no tienen memoria, es que no han aprendido nada de la muerte…el
amor es lo único que queda”…. (Repican las campanas, también el “asotó” y
los tambores de Bwa Kayiman en la tierra de Toussaint, Dessalines y Petion…
es un llamado a la conciencia y a la esperanza…).
4h53 PM