Nosotros organizaciones sociales y políticas reunidas en Port-of-Spain – Trinidad y Tobago – en ocasión de una Reunión Hemisférica sobre la Coyuntura Política y Económica Actual y del congreso fundacional del Movimiento para la Justicia Social (MJS), junto a otras organizaciones sociales del Continente, nos dirigimos a ustedes para expresar nuestra preocupación y angustia frente a la situación que vive el Pueblo haitiano y las respuestas inadecuadas ofrecidas a esta crisis por la llamada “comunidad internacional” con la activa participación de varios gobiernos latinoamericanos que juegan un papel de liderazgo dentro de la MINUSTAH.
1.- El hermano pueblo de Haití esta viviendo una grave crisis resultado de su permanente marginalización después de la gran revolución anti-esclavista de 1804. Esta crisis fue agravada por la regresión provocada por 29 años de dictadura duvalierista (1957-1986) y la aplicación desde 1983 de medidas de ajuste estructural que contribuyeron a destruir gran parte de su capacidad productiva y de sus instituciones. El devastador terremoto del 12 de enero del 2010 ha agravado la crisis estructural con la destrucción de 120% de su PIB, un saldo impresionante de pérdidas y un empobrecimiento dramático de más de 70% de la población.
2.- La presencia de las Naciones Unidas en Haití, con varias fórmulas desde enero 1992, no ha contribuido a mejorar la situación. En junio 2004 se instalaba la MINUSTAH (la Misión de Naciones Unidas para la estabilización de Haití) con los objetivos de:
• a) Restablecer un clima de seguridad y de estabilidad
• b) Ayudar a realizar elecciones democráticas
• c) Promoción y respeto de los derechos humanos
• d) Ayudar a relanzar la economía
• e) Vigilar las fronteras
Estos objetivos definidos en varias resoluciones del Concejo de seguridad de las Naciones Unidas entre 2004 y 2010 no han sido realizados. Incluso en algunos aspectos la situación sigue deteriorándose.
3.- Durante los 7 últimos años el Pueblo haitiano realizó movilizaciones significativas, algunas con la participación de decenas de miles de manifestantes, para denunciar la presencia de esta fuerza de ocupación, su total inadecuación y su carácter represivo. En octubre del 2010 apareció una epidemia de cólera, una enfermedad que había desaparecido del país desde más de un siglo. Todas las investigaciones conducidas por científicos y organismos especializados de Francia, de Estados Unidos y expertos de la OMS concluyen que esta enfermedad fue introducida por soldados de la MINUSTAH. La enfermedad causó más de 4600 muertos, más 280.000 afectados y pérdidas económicas importantes con la drástica reducción de las importaciones del país a nivel de la frontera con la República Dominicana.
Tomando en cuenta estos elementos queremos someter a ustedes las demandas siguientes:
1.- Que los gobiernos latinoamericanos tomen todas las medidas necesarias para que la resolución de la crisis en Haití sea un elemento prioritario de su agenda continental. La gran contribución de la revolución haitiana al proceso de emancipación de todos los Pueblos y a la globalización de los derechos humanos merece que luchemos para que Haití no caiga en el olvido y en nuestra indiferencia. La capacidad de los Pueblos latinoamericanos a contribuir a ayudar el Pueblo haitiano a salir de la crisis debería ser un elemento clave del nuevo proceso de integración en curso que levanta tanta esperanza.
2.- El retiro inmediato de las tropas latinoamericanos de la MINUSTAH que constituye una ofensa a la dignidad del Pueblo de Haití y que, en su formato actual, constituye un peligroso precedente para el respeto de la autodeterminación de los Pueblos.
3.- La organización de una conferencia de gobiernos latinoamericanos para estudiar las modalidades a construir para expresar la solidaridad de nuestro continente con el Pueblo haitiano y que tiene que desembocar sobre nuevas instituciones, programas y proyectos de corto, mediano y largo plazo propicios a una materialización de la solidaridad de nuestros países con el Pueblo haitiano. La maravillosa cooperación de Cuba con Haití (particularmente en el sector de la salud) desde 1998 y del gobierno bolivariano desde 2006 son modelos convincentes de la viabilidad de una cooperación alternativa, respetuosa y efectiva.
4. Los gobiernos de UNASUR deberían ser portavoces y defensores de los intereses de largo plazo del Pueblo haitiano en todos los espacios regionales y multilaterales y expresión de una lectura distinta de lo que vive Haití desmintiendo la propaganda racista y simplista que domina el discurso de la gran prensa internacional sobre el país y que caracteriza muchas veces las intervenciones de las agencias internacionales en este país.
5.- La situación actual exige un apoyo masivo e importante para responder a la crisis coyuntural post-terremoto pero también para ayudar al Pueblo haitiano en la construcción de un futuro de bienestar y de prosperidad.
Los Movimientos, organizaciones y partidos políticos reunidos en Port-of-Spain se comprometen a realizar durante los próximos meses una importante misión de solidaridad en Haití para la materialización de una nueva visión sobre lo que debe ser la solidaridad de nuestros Pueblos con Haití hoy.
Esperamos que su decisión de retirar inmediatamente sus tropas de la MINUSTAH y de abogar por el desmantelamiento de esta fuerza de ocupación y la construcción de una cooperación alternativa contribuya a responder de manera eficiente a la crisis vivida en Haití y sea al mismo tiempo una señal fuerte de su determinación a romper con los esquemas tradicionales y a emprender nuevos caminos fieles a las indicaciones trazadas por los fundadores de nuestras naciones. Viva la autodeterminación de los Pueblo!. Viva la integración alternativa de nuestros Pueblos!
Firmada por:
– Otros Mundos/Amigos de la Tierra, México
– Bloque Popular Hondureño
– Clement Payne Movement, Barbados
– Comité Pro Niñez Dominico-Haitiana, Puerto Rico
– Common Frontiers, Canadá
-Communication Workers’ Union, Trinidad and Tobago
-Conise, Paraguay
– Corporación Mujeres y Economía/Marcha Mundial de
Mujeres, Colombia
– Federation of Independent trade Unions and NGOs,
Trinidad and Tobago
– Grito de l@s Excluid@s, Puerto Rico
– Insurrección Autónoma Honduras
-Jubileo Sur/Américas
-Jubileu Sul Brasil
-Marea Creciente, México
-Movimiento Social de Nicaragüense
-Movement for Social Justice, Trinidad and Tobago
-Oilfields Workers’ Trade Union, Trinidad and Tobago
-Organización de Solidaridad con los Pueblos de África,
Asia y América Latina
-Proyecto Caribeño de Justicia y Paz
-Working Peoples’ Alliance, Guyana
-Voces Ecológicas, Panamá
-UNES, El Salvador
-Centro Memorial Martin Luther King Jr. Cuba
-Trade Union Federation C-47, Suriname
-Suriname Labour Party, Suriname
-Red Sin Techán, El Salvador